Cuando en su momento se nos ocurrió la idea de hacer entrevistas en estudios, mi primera idea fue de ir yo mismo con mi cámara de fotos y hacer la entrevista. Sin embargo a Paco se le ocurrió la idea que grabando la entrevista en vídeo sería más interesante. El formato de vídeo es un formato que sin duda nos ha dado mucho éxito, pero también nos a apartado un poco de la gente mas nostálgica que les gustan entrevistas escritas con reportaje fotográfico. Yo en todo momento di la opción de hacer entrevistas en formato vídeo o con cámara de fotos y escrita y casi todos los entrevistados se decantaron por el vídeo. Sin embargo la entrevista que os ofrecemos ahora, fue solicitada expresamente en formato escrito y con cámara de fotos, así que esperamos que os guste y que más gente se apunte a ellas.
A disfrutarla.
Háblanos un poco de vuestros comienzos.
SONOBOX nació hace 20 años. Comenzamos en un estudio mucho más pequeño en esta misma calle. Creo que antes de que se acuñara el concepto “Project Studio”, ya ejercíamos como tales. Una mesa mackie, 32 pistas de Adat e ilusión para dar y tomar. Tanto mi socio Javibu como yo, éramos músicos y tocábamos en nuestra propia banda y también hacíamos sesiones grabando para otros artistas. En aquel entonces, en los estudios en España abundaba un perfil de ingeniero de sonido o bien residente o free lance, pero no estudios montados por músicos que hicieran labores técnicas y también musicales y de producción. La formación fue plenamente autodidacta por “ensayo y error”. En ese momento no había escuelas dedicadas a enseñar este oficio como existen ahora y ni siquiera internet. Fue con la llegada de la red cuando empezaron a aparecer blogs y foros y donde tuvimos la oportunidad de empezar a contactar con ingenieros y productores de todo el mundo y aprender a través del intercambio de información. Esta quizás fue la primera “universidad” para nosotros. Devorábamos todo lo que se ponía por delante: revistas, foros, entrevistas y muchos discos cuyas producciones admirábamos. Este proceso no ha parado desde entonces, asistiendo actualmente a experiencias como Mix with the Masters donde se recupera el proceso tradicional y artesanal de aprender observando al Maestro, cosa que en esa época no abundaba en España.
¿Como fue la etapa previa a Sonobox?
Esa etapa la recordamos con un cariño inmenso. El primer SONOBOX era un sótano pequeño pero acogedor y creo que bastante inspirador. El primer trabajo que hicimos fue la banda sonora para una serie de Antena 3 que se llamaba “Ay Señor”. Luego hicimos demos y preproducciones de proyectos que nacían en ese momento. Ella Baila Sola , Javier Álvarez, Pedro Guerra… Demos de proyectos como “Alma Marter”, grupo donde tocaba Alvaro de Vetusta Morla; Deus Deceptor, primera formación antes de XXL, la banda de new metal a la que posteriormente produjimos dos álbumes. Hubo momentos memorables y mágicos trabajando con Enrique Morente en la preproducción y grabación del “Omega”, o grabando para Víctor Manuel el álbum “Cada uno es como es”. Ahí conocimos a Antonio García de Diego y Pancho Varona e hicimos varios trabajos para artista como Joaquín Sabina. Una época donde acompañaba la ilusión que le echábamos con una Industria musical más sólida y nutrida.
¿Cómo se gesto el actual estudio Sonobox?
El estudio actual nació porque el primer SONOBOX se empezaba a quedar muy pequeño. Tanto por espacio como por entidad de los proyectos que estábamos haciendo en ese momento. Grabábamos producciones pero se terminaban mezclando en otro estudio más grande a veces por el factor “imagen” más que por el sonoro. De ahí, entendimos que era el momento de movernos. Encontramos un local idóneo para lo que necesitábamos, a 100 metros en la misma acera, así que fue un cambio importante para nosotros. Estaba anclado al mismo barrio en el que estábamos muy a gusto y también deducíamos que resultaba accesible a muchos de nuestros clientes. Después de consultar a varios diseñadores acústicos, nos atrajo la propuesta de Philip Newell. Visitamos un estudio en Vigo llamado Areamáster (actualmente Planta Sónica) y nos gustó mucho tanto el control, como la sala de grabación. Nos sedujo también el concepto de “non enviroment”. Así que nos pusimos manos a la obra.Y la obra resultó ser muy compleja y complicada por el hecho de montar un estudio de estas características en el centro de Madrid. Llevó mucho más tiempo lo previsto por muchos factores. Las descargas de tanto material acústico en el centro de Madrid, el almacenamiento, etcétera. Philip hizo un gran trabajo. Para él, era su primer estudio en la capital y, a su vez, en un edificio con viviendas, así que se lo tomó como un reto tanto profesional como personal. Hubo por su parte plena implicación. La construcción la recordamos como una etapa muy dura llena de retos diarios. Siempre decimos medio en broma que montar un estudio “Nunca Mais!!!”. También hubo días maravillosos que no olvidaremos. Se alojaba en el hotel de al lado Antonio Vega y de repente llamó un día a la puerta comentando que se había enterado que estábamos montando un estudio. Pasó con nosotros toda la mañana interesándose muchísimo de todas las cuestiones físicas del aislamiento sonoro. Él era un gran amante de la física y la astronomía y se notaba. Nos pareció un ser con una sensibilidad tremendamente especial y muy inteligente. Otra visita memorable durante la obra, fue la de Cyril Jones, el “papa” de las mesas Raindirk. Era muy colega de Philip y se presentó un día en medio de la obra para visitarlo. Comimos todos juntos y me pareció una ocasión extraordinaria para aprender de dos tíos tan potentes. Los dos cracks se pasaron toda la comida hablando de fútbol y pasando totalmente del audio. Cyril arbitraba partidos los fines de semana y se notaba que disfrutaba como un enano haciendo esto.
Aun así, el esfuerzo de la obra mereció la pena porque estamos súper contentos con el resultado y lo disfrutamos tanto nosotros como los artistas y clientes para los que trabajamos desde el primer minuto. En los 14 años que llevábamos aquí, trabajamos sin limitaciones de horario ni limitaciones de volumen . Creo que Philip consiguió una sala de grabación con un sonido muy natural donde, si pones bien los micros, no tienes que estar haciendo mucha reestructuración con ecualización ni corregir cosas. El control es una delicia por el grado también de resolución y naturalidad que ofrece.
¿ Cómo es vuestro método de trabajo?
Desde hace años manejamos como concepto un sistema “híbrido”. Trabajamos con Pro Tools pero mezclamos “fuera de la caja”. En este sentido le pedimos al gran Pablo Kahayan hace años que nos hiciera un sumador, tras ver en Estados Unidos el nacimiento de cacharros como el Dangerous 2 bus o el Folcrom. Y así, nació el primer prototipo de Épsilon. Un sumador de 16 canales que estuvimos “afinando” con Pablo durante casi un año. Posteriormente, le pedimos a Pablo ampliarlo a 24 canales y ahí nació el prototipo del Épsilon 2 que actualmente disfrutamos. La necesidad de esto viene porque en aquel momento, cuando nos pasamos de un mesa analógica a mezclar en pro tools, notábamos que el sonido se estrechaba mucho. Hoy yo creo que el debate analógico- digital , en y fuera de la caja, cada vez tiene menos relevancia. Las plataformas digitales han mejorado una barbaridad, al igual que los Plug-ins y se pueden hacer verdaderas virguerías. Aun así, preferimos y estamos acostumbrados trabajar de esta forma por el resultado sónico que nos da. Respecto a la grabación, siempre hemos mantenido un enfoque de no dejar “deberes” a posteriori. Es decir, grabar de la mejor manera posible para que la mezcla sea un disfrute creativo y emocional y no una rectificación de errores y para que, a su vez, finalmente el mastering sea una cosa más de redondeo final que de “salvar los muebles”.
Hablemos de cacharrines
Pues con el paso del tiempo acabas cogiéndole cariño a cacharros que te han prestado un servicio excelente, son versátiles y no han dado un problema. Además, si tienes la oportunidad de conocer al “papa” de la criatura, ver qué filosofía inherente maneja y cómo entiende el audio y la música, y aprender de él, se estrecha más ese lazo con el cacharro. En este sentido creo que Distressor y la cabeza de Dave Derr son alucinantes, al igual que Leif Mases con Maselec o Dave Hill con Cranesong. Este último es tan “freak” que en uno de sus EQ’s, en vez de poner bandas de frecuencias puso acordes. Este cacharro nos gustó sónicamente pero era un infierno trabajar con el. En España todo lo que sale de la cabeza de Pablo Kahayan es maravilloso y disfrutamos de sus equipos y de su amistad.
En mi opinión, un equipo puede ser neutral, transparente o por otro lado, dar color u “opinar” sobre el hecho sónico. De ahí la elección que cada uno quiera hacer. Sin embargo, en uno u otro caso debe, bajo mi punto de vista, ser “noble” con el sonido. Hay equipos que “plastifican” , que generan un “hype”, que seducen a la oreja inicialmente pero después en mezcla o en la interacción con otras tímbricas te “traicionan” y ves que tienes que estar recomponiendo con ecualizacion o compresión. Son equipos de los que tratamos de huir. Desgraciadamente, a muchas de las cosas más modernas y contemporáneas que se están fabricando hoy en día les pasa esto. Equipos como nuestros Urei La3 originales son un ejemplo de esto. Se hicieron hace un montón de años, son muy versátiles, no han dado un problema y está claro que su impronta sónica perdura y resiste bien el paso del tiempo.
¿Cómo enfocáis las producciones?
A la hora de producir, somos muy “artesanales”, no porque nos falten medios, sino por el cuidado de los detalles y porque nos gusta cubrir cada fase de la producción de manera que no pasamos a la siguiente si el artista y nosotros no estamos completamente satisfechos. Siempre hemos sido muy exigentes con los repertorios, porque es la madre de todos los corderos. Podemos echarle toda la pirotecnia técnica que queramos pero a una mala canción difícilmente podamos “vestirla de seda” si no es buena de origen. De ahí que, honestamente, si sentimos que no tenemos temas de calidad , es mejor no “rascar” y pedirle respetuosamente al artista que siga componiendo. El camino fácil y que probablemente haga más “caja” es el de “ tio como molas” y “ vaya pedazo de hit que tienes”, y bla bla bla, pero eso es pan para hoy y hambre para mañana.
Por otra lado, no discriminamos estilos musicales a la hora de producir ni centrarnos en un solo estilo. Nos gusta ser versátiles y ponernos al servicio de la canción y del artista y no entrar en debates de si lo indie, lo mainstream, etcétera. La MÚSICA es mucho más grande y amplia que todo eso.
¿Con quienes habéis trabajado? ¿Con quién te gustaría trabajar? ¿Cuales son tus referentes?
Este es un oficio en el que no paras de aprender y que cada trabajo requiere un enfoque diferente. Cada artista con el que trabajas te aporta algo y lo vas sumando al saco de la experiencia que probablemente uses para el siguiente proyecto. Nos gusta y nos gustaría trabajar con todo aquel que tenga un “sentido “ de oficio, que cuide sus canciones y su forma de tocar, que sea capaz de defenderlas en directo y que se preocupe por eso casi de una forma “obsesiva”. En cierta manera, creo que ha habido cierto “relax” con esto por la ayuda de las tecnologías, pero el eje que mueve todo esto y hará que perdure será ese sentido de “oficio” .
Como referentes musicales, la lista es interminable, porque me gustan muchísimos estilos. Profesionalmente, creo que mi vida es mucho mejor gracias a Ruper Neve, a Bob Clearmountain, a Al Schmitt, Andy Wallace y Manny Marroquin. Han sido seres verdaderamente inspiradores.
¿Qué porcentaje en el resultado final de una produccion le asignarias a: la producción, los tecnicos, el equipo, el estudio, los musicos?
No sería capaz de ponderarlo. Cada uno de los elementos puede engrandecer o directamente cargarse el trabajo de los otros. Canciones y músicos quizás sean los miembros más importante en toda esta ecuación.
¿Cuál crees que es el futuro de la industria musical?
Creo que el mundo de la música está en plena forma ya que ideas, talento y creación, al ser algo inherente al ser humano, no hay quien lo pare. Y acceder a eso o ser accedido es más fácil que nunca. La que sigue por su lenta travesía del desierto es la Industria de la Música, que está sufriendo un profundo cambio estructural de modelo. Y en el caso concreto de nuestro país, la desidia, abandono y maltrato con Ivas fuera de tono y la no consideración en absoluto de industria ni de bien cultural por parte de ninguno de los gobiernos. La Industria Musical saldrá de esta travesía cuando el modelo de streaming y digital se haya instaurado definitivamente y no sólo supla las pérdidas por ventas físicas, sino que establezca un modelo de reparto justo que permita a todos los agentes involucrados hacer de esto algo sostenible. Si, además,consiguiéramos que alguno de los gobiernos futuros realmente acabara entendiendo que no sólo se trata de nuestro acervo cultural y nuestra esencia como pueblo, sino que además es algo productivo que genera riqueza, pues a lo mejor la industria musical española “resucitaría” de su certificado de defunción. Uno se da cuenta de la “no Industria” que tenemos en España cuando viajas fuera y tienes posibilidad de trabajar con otros colegas y ver el flujo de trabajo que tienen y la infraestructura con la que cuentan. Además de contar con gobiernos que valoran y protegen todo esto. Respecto al futuro de la grabación, creo que siempre se necesitarán estudios y buenos profesionales. Eso sí, la forma de entender los presupuestos, las infraestructuras y las inversiones en equipo no tiene nada que ver. Hay claramente un antes y un después. La clave está en resistir a todo este proceso de transformación y sobre todo, saber adaptarse.
Creo que hubo un claro “hype” con el “hágaselo Ud mismo” y ha permitido la democratización de muchos de los procesos. Pero, para muchos artistas, por lo general, llegado el momento de hacer un proyecto importante, prefieren trabajar en buenos entornos acústicos y contar con profesionales que tengan experiencia y que hagan viajar bien sus canciones y sin “sorpresas”.
Muchas gracias a Manuel Colmenero y Javibu
Nota del entrevistador: Me gustaría dejar constancia de dos cosas fundamentalmente, dado que fuí yo mismo en persona el que saco la fotos y tuve el placer de compartir unas horas con Manuel, pude probar el control room. Mi visión particular de esta sala de control y su acústica es que es realmente espectacular, creo que el nivel de detalle que se alcanza, usando una sala tan pequeña es extremadamente dificil, y creo firmemente que el grado de detalle se consigue gracias al diseño de una sala acústica y de unos altavoces para esta sala acústica. Es su conjunto el que hace que suene espectacular. A parte me gustaría comentar mi experiencia acerca de los equipos de Raindirk. Cyril Jones, es de esas personas, que nunca han llegado a tener la fama de Rupert Neve pero que desde luego no se queda corto. De hecho en el momento de la publicación de esta entrevista, Sonobox está vendiendo una mesa Raindirk, que si no fuese porque acabo de recibir la mía, la hubiese adquirido seguro.
Me ha encantado el principio musical y de preproducción que tiene, antes de cualquier otra cosa.
PD: Como no se puede escribir en otro sitio…. Lo hago aquí.
HECHO DE MENOS EL FORO….. snif snif 🙁
Prefiero las entrevistas en video, son más amenas y da para explayarse mucho más. Aunque respeto al que le mole más el tema de entrevista escrita.
El video me parece más espontaneo.
Algunos de los mejores recuerdos de mi vida musical quedaron en aquel primer estudio, el actual es simplemente fantástico, suena espectacular, es muy bonito, amplio y un claro paso adelante con respecto al primero, pero aquel desprendía un algo… supongo que ayudó mucho también la situación concreta que estaba viviendo en aquellos momentos.
Es imposible decir nada acerca de estos dos fenómenos salvo alabanzas, tanto Manuel Colmenero como Javier Carretero son enormes como profesionales y personas, hace años que no me paso por allí y espero poder hacerlo pronto.
Enhorabuena por la entrevista, creo que es un gran acierto mantener ambos formatos, escrito y vídeo… a ver si cae también la de Javibu pronto 😉
Vamos a tratar de mantener ambos formatos, de hecho a los entrevistados se les esta ofreciendo ambas opciones y son ellos los que eligen 🙂